Más importante que la audiencia regrese a tu blog, es lograr que participe.
Estoy seguro que con el titular he atraído especialmente a los blogueros principiantes, que son fundamentalmente los que tienden a preguntarme ¿cada cuánto hay que publicar?. Para ser sincero, la frecuencia de publicación en el blog, tiene una única respuesta correcta: depende. Y no por lo famoso que seas, ni el posicionamiento que hayas logrado o que buscas, o el sector al que te dirijas con tus post; antes de darte una respuesta concreta lo primero que vas a hacer es preguntarte:
- ¿Qué tipo de contenido publicas?.
- ¿Quiénes son tus lectores?.
- ¿Con qué recursos cuentas?.
- ¿Cada cuánto tiempo tus lectores quieren leerte?.
Redactar nuevas entradas para el blog es uno de los principales retos para un principiante o un neófito. Si lo que quieres es aumentar las visitas deberías publicar 2-3 post semanales, y una vez que hayas empezado ya no hay marcha atrás. Has hecho lo más difícil, escribir el primer artículo y ahora pueden pasar dos cosas: que, tras la euforia inicial, te des cuenta que tu blog ha llegado para quedarse (de hecho, ése debería ser el objetivo) o que dedicarle el tiempo necesario va a ser un reto imposible. Más del 50% de los blogs, de hecho, mueren antes de llegar a cumplir un año de vida.
Ahora bien, ¿cada cuánto se supone que debemos actualizar nuestro blog con nuevos contenidos y, al mismo tiempo, no morir en el intento?. Al señor Google le gusta el contenido fresquito, -orgánico- y cuanto más actualices tu blog más te tendrá en cuenta porque sabrá que vas en serio y más páginas te podrá indexar para ofrecerlas de vuelta en sus resultados de búsqueda. E igual ocurre con todas esas personas que quieres que acaben convirtiéndose en lectores; quieren (queremos) contenido útil y de calidad, pero la competencia es dura. Cuanto más escribas más oportunidades tendrás de convencer a la gente de que lo que ofreces merece la pena y, con ello, recibir más tráfico. Lo ideal sería, por tanto, escribir a diario. Pero, no nos engañemos, lo ideal no suele ser precisamente lo fácil, ¿verdad?.
Si no eres un escritor nato (como la mayoría de los bloggers) probablemente tardarás horas o incluso días desde teclear las primeras palabras hasta la edición y publicación final del artículo. Lo malo de un blog es que no te espera y requiere una actualización continua, y con lo que te costó el primer post probablemente no te ves capaz de publicar mucho más de una entrada al mes. Aún así, como consejo profesional, el número de entradas que vayas a publicar es como trabajar en una redacción: no es lo mismo editar una revista anual, mensual, quincenal o publicar en un diario, en el que la actualización (incluso horaria) es la base del negocio. Y los resultados (¡vaya!) si se notan.
Si no actualizas, o no sabes hacerlo, es mejor que elimines el blog. Perjudica tu imagen de Marca.
Si estás empezando, lo ideal son 3-5 posts por semana.
Imagínate que tienes la suerte de recibir un retweet de un tuitero con muchos seguidores y con tu primer post recibes una avalancha de visitas. Honestamente no ocurre con frecuencia pero siempre es posible. Puede también que tengas amigos que desde sus blogs o cuentas de Twitter te echen un cable el día del lanzamiento. Has publicado el primer post porque por algo hay que empezar. Aunque únicamente lleguen pocas personas, estas no tienen más que un post para leer. Tal vez les gusta incluso lo que has escrito y pasarían más tiempo leyendo si hubiera una mayor oferta de contenidos. En este caso has perdido una pequeña oportunidad de convertir los primeros visitantes en lectores porque aparte de la primera entrada no tienes nada que ofrecer, o peor aún, llevas tiempo con tu presencia online lanzada y los post están muy distanciados en el tiempo; la sensación que da es de desidia, de abandono. canlı bahis
Actualización para el posicionamiento en Google.
Todo requiere su tiempo. Al principio parece un reto casi imposible de cumplir. La buena noticia es que publicar con frecuencia en un blog es una cuestión de entrenamiento. Cuanto más publicas, más fácil será con el tiempo. No tengas miedo que las ideas se te acaben. Es cierto que algunos días te sentirás bloqueado y con poca inspiración pero eso también se supera. Aunque tal vez no lo parezca, la falta de ideas es algo que a todos nos ocurre con frecuencia. Si lo que realmente te interesa es posicionar bien en buscadores es importante que actualices con una frecuencia alta tu blog. Si puedes publicar uno al día, todavía mejor. No te asustes, puedes ir paso a paso, los resultados no suelen llegar de manera inmediata y tardan meses en tener efectos visibles.
Como en todo, no hay una fórmula mágica y al final es cuestión de trabajo y constancia (no hay otra) pero como siempre hacemos en nuestros post te contamos experiencias propias, sobre todo para esa primera etapa en la que es más fácil perder el norte.
► Márcate tu ritmo, y cumple. Comprométete, antes que con nadie, contigo mismo. Mientras te ciñas a un plan, todo irá mejor, escribas con más o menos frecuencia. Pero, eso sí, si lo que quieres es conseguir tráfico –sobre todo si quieres vender-, piensa que para obtener resultados deberás escribir al menos tres post por semana.
► ¡S.O.S.! ¿Seré capaz de generar suficiente contenido?. Si ya te has marcado una frecuencia de publicación de nuevos post, lo primero es decidir de qué vas a hablar. Y, entonces, en función de lo ambicioso que sea tu plan lo mejor es hacer una línea editorial. Reúne ideas, lístalas, organiza los temas y los tiempos y créate un “colchón” de publicaciones interesantes. Con ello podrás recurrir a temas dispuestos y cumplir con tu rutina de publicación si la inspiración no llega.
► Anota cada nueva idea. Mientras ves la tele, lees artículos de otros bloggers, sacas al perro, durante una conversación, mientras estás divagando sobre tus cosas,… Al final, las ideas surgen. Aunque la inspiración no te llegue trabajando, no dejes nunca de anotar esa nueva idea que al menos te ha parecido interesante explorar. Las notas mentales no cuentan, corremos el riesgo de perderlas (por experiencia lo digo). Si tienes a mano una libreta, en el teléfono móvil,… donde sea, pero apunta cada nueva idea.
► Niveles de exigencia Vs frecuencia de publicación. Si te juegas mucho y te has puesto un nivel de exigencia elevado y que te resulta difícil mantener, una de dos: o bajas el nivel o publicas mucho. Si no se te ve / lee, “se viene abajo”. Hay artículos que requieren de más investigación y elaboración que otros y no siempre es fácil disponer del tiempo necesario. No se trata de rebajar tus niveles de exigencia, al final hagas lo que hagas siéntete satisfecho de haberlo hecho lo mejor posible y de acuerdo a tus objetivos. No pasa nada porque, aunque te lo hayas propuesto, no todos tus artículos tengan la misma “brillantez”. Te organices como te organices, ten siempre bien presente tu objetivo: ¿Qué es lo que pretendes conseguir con tu blog? Si el objetivo merece la pena, el blog también, cuídalo.
MAXBlog. Un buen ejemplo de eficacia.
Información y servicio público. cybconsultoria.com
Tipo de contenido
Mashable, Techcrunch, hay miles de blogs que publican cientos de post a la semana, sin embargo, eso no quiere decir que tú tengas que hacer lo mismo para tener éxito. Este tipo de blogs generan contenido del día y por eso escriben constantemente para ofrecer a sus usuarios lo que están buscando: estar al día. Conocer el tipo de contenido que vas a publicar te dará la clave: si vas a publicar noticias o contenido de este tipo, es decir, “para el mainstream”, entonces deberás publicar varias veces al día. Sin embargo, si escribes tutoriales avanzados, “how-tos”, estudios, análisis detallados, información de tus productos, etc. este tipo de contenido podrá ser publicado con menos frecuencia, normalmente no más de una vez al día. Tu usuario necesitará digerirlo por lo que darle muchos de estos cada día no será lo más óptimo.
Tu público.
¿Cuanto tiempo consigues retener a tus usuarios en tus posts? ¿Qué tipo de usuarios son?, ¿Logras venderles?. Dependiendo de quienes sean tus lectores podrás saber que tipo de contenido deberás hacer y cada cuanto. Si son profesionales del sector, tendrán mucho interés pero poco tiempo, por lo que tu contenido debe ser directo, de calidad y lleno de interés. Concreta y agrupa bien lo que quieres contar y genera expectativa para el siguiente post (estarán esperándolo). Por el contrario, si tu buyer persona es un adolescente fan del sector de los juegos, tendrán muchísimo más tiempo pero no prestará tanta atención: publica mucho durante el día en formato corto y en formato audiovisual.
Al principio vas a querer publicar 30 veces a la semana pero realmente solo vas a tener tiempo de hacerlo 3 veces. La clave entonces será que esos 3 post que publiques merezcan la pena. Empieza a hacer contenido que tus usuarios digan “¡WOW!” y verás como la frecuencia pasa a un segundo plano, ellos esperarán por ese contenido tanto como haga falta.
Piensa algo importante, si publicas mal, o dos o tres veces al mes, tus usuarios sentirán que te echan de menos y crear ese sentimiento hacia tu marca es vital para construirte una reputación. Por ejemplo, muchos blogs son famosos por la semana, tienen mucho tráfico, y luego los fines de semana no consiguen nada, entonces, ¿para qué malgastar ese tiempo y esos recursos? Disfruta del fin de semana con la familia, ellos te lo agradecerán.
Las interacciones en redes sociales son muy importantes, no cabe duda, pero importa más aún, que la gente se involucre con el contenido que publicas, entre a leerlo, comente y comparta.
La frecuencia importa, pero no es lo más importante.
Olvídate de lo que digan los “gurús”, o de lo que te hayan vendido para atraparte como Cliente, porque conocer a tus lectores y saber determinar personalmente cada cuánto debes publicar depende de tu tipo de contenido y tu audiencia. Es la clave. Ahora bien, independientemente de la frecuencia, no tendrás éxito si tu contenido no es bueno, recuerda: contenido diferente, de calidad y único (post sosos = lectores sosos) es el factor determinante del éxito de tu blog. Haz contenido que merezca la pena esperar, solo así dejará de importarte la frecuencia. Y sino, pregúntate, como lector, ¿qué prefieres? ¿7 posts al día, de contenido pésimo, o solo uno, pero espectacular?.
No lo olvides: mucho más importante que tu audiencia regrese a tu página es hacer que tu audiencia participe.